Tras la intensa Carpa Roja de diciembre dedicada a «soltar», entramos en este nuevo año con más espacio, más apertura, más posibilidades.
El invierno es el momento de descansar, de acoger las percepciones y de pensar en las semillas de nuevos proyectos, de nuevas tomas de conciencia, de intenciones especiales que darán sus frutos a su debido tiempo.
Es cierto que la vida nos da lo que necesitamos para nuestra evolución, y cuando hablamos de «rendirse» nos referimos a aceptar lo que hay y comprender cómo lo que hay puede ser útil para nuestro camino.
Pero todo esto no excluye el hecho de que cada uno de nosotros desee dar una dirección a su vida, alcanzar ciertos objetivos, realizar ciertos sueños… y es precisamente danzando junto con la vida (y no contra ella) como podemos comprender poco a poco cómo y hacia dónde dirigirnos para realizar la vida que queremos y también comprender si «la vida que queremos» es realmente lo que queremos o más bien lo que creemos que queremos.
En una noche de luna menguante, iremos en busca de lo que es realmente importante para nosotros y de lo que deseamos confiar a las energías especiales del invierno para recibir pistas, percepciones, dones a través de los cuales, a su debido tiempo, floreceremos de nuevo y recogeremos los frutos de nuestra renovación.
Una velada para recuperar la claridad y el centro, para que nuestro corazón siga latiendo y continuar nuestro camino tomando decisiones amorosas respetándonos a nosotros mismos.
Jueves 10 de enero a las 18.30 Centro Le Maree – Corso Torino 9/1 esquina con Via Smirne
para información : info@francescadalessandro.net